K-PUNK volumen 1
Escritos reunidos e inéditos
(Libros, películas y televisión)
Mark Fisher
Traductor: Fernando Bruno
Editor: Darren Ambrose
Prefacio: Simon Reynolds
Editorial Caja negra
392 páginas
(Buenos Aires)
Mark Fisher (Reino Unido, 1968-2017) escritor, crítico
musical y editor,
reconocido por su influyente blog k-punk, por su trabajo
como director
de la editorial Zer0 Books y como profesor en el
Departamento de Culturas
Visuales de la Universidad Goldsmiths, Londres, comenzó a
editar su blog
k-punk en la primera época de los blogs. Rápidamente se
transformó en una
parte importante de esa comunidad emergente, que incluía a
los periodistas
de música Simon Reynolds, Ian Penman y David Stubbs, a los
filósofos Nina
Power, Alex Williams, Lars Iyer, Adam Kotsko, Jodi Dean y
Steven Shaviro, al
escritor y activista Richard Seymour, a los escritores Siobhan McKeown y Carl
Neville, y al crítico de arquitectura Owen Hatherley. Uno de
los aspectos más
vitales de escribir en k-punk durante esos primeros años fue
el simple elemento
de la reconexión, de involucrarse en un nuevo colectivo
online en un momento
de su vida – luego de Warwick, la CCRU y el doctorado en
Filosofía- en que se
encontraba bastante aislado.
Fisher dijo en una entrevista en 2010:
“Comencé a postear en el blog como un modo de volver a
escribir luego de la
experiencia traumática de hacer un doctorado. El trabajo del
doctorado hace que creas
que no se puede decir nada sobre ningún tema hasta no haber
leído a todas sus autoridades.
Pero escribir en el blog parecía un espacio más informal,
sin ese tipo de presiones.
Era un modo de forzarme a regresar seriamente a la escritura…”.
Estos posteos de k-punk encapsulan un momento intelectual de
reflexión sobre el mundo:
son receptivos, inmediatos y ofrecen una perspectiva cargada
de afectos.
Algunas de sus referencias y alusiones son sin duda
desafiantes y potencialmente intimidantes
-Spinoza, Kant, Nietzche, Marcuse, Adorno, Althusser,
Deleuze y Guattari, Baudrillard, Jameson,
Zizek, Zupancic, Berardi, Badiou, Lacan –pero nunca están
marcados por la fervorosa
pedantería que exhibe en general la escritura académica en
el ámbito teórico de las
humanidades. Mark tenía fe en la inteligencia y en la
racionalidad de sus lectores; confiaba
en su capacidad de ser desafiados por lo que no les era
familiar, por lo complejo y lo nuevo.
Mostraba constantemente mucha valentía para tomar una fuerte
posición teórica y práctica.
Su obra iba contra la actual corriente antiintelectualista,
que ha intentado aplanar las cosas
hasta el nivel de la instrumentalidad cretina y la estupidez
utilitaria.
El libro K-punk volumen 1, reúne también los dos posteos ¿Por qué k? y “Meme de libro”, ambos
escritos en 2005, que nos brindan un preciso conocimiento de
las razones de Mark Fisher para publicar en k-punk, y también nos dan la posibilidad de entender sus
objetivos operativos y sus ambiciones.
Uno de ellos es la simple convicción de tomar la nueva
democracia tecnológica de los blogs y
utilizarla como un “conducto para el continuo intercambio entre la cultura
popular y la teoría”.
La fe de k-punk en la importancia de las formas marginales
del discurso nunca disminuyó. Hay una
consistente convicción en la efectividad operativa de los
discursos fugitivos que no han sido
legitimados ni por los canales oficiales del establisment (a
través de la academia o los medios
de comunicación del mainstream) ni por las publicaciones en
formatos tradicionales.
Finalmente, en el blog k-punk hay una siempre evidente
antipatía y una negatividad ejemplar
hacia las posturas hiperirónicas del posmodernismo, el
izquierdismo liberal tristemente
esperanzado, la cultura deslibidinizada, la superioridad de
las clases altas, los trolls vampíricos,
la positividad vitalista y el creacionismo deleuziano.
El libro reúne una parte significativa de esa desbordante
producción online, además de reseñas,
columnas de opinión, artículos activistas y ensayos que
publicaba simultáneamente en revistas y
libros. Esta ambiciosa recopilación se propone reconstruir
por primera vez la huella de aquellos
años de escritura frenética y contagiosa en los que ya
aparecían las obsesiones de Mark Fisher:
el modernismo popular, los privilegios de clase, la
precariedad y la depresión, las formas postca
pitalistas del deseo, la hauntología y el realismo
capitalista. Este libro – el primero de tres volúmenes-
compila sus textos sobre literatura, cine y televisión, y
cubre un amplio arco de referentes que incluye
a autores como J.G. Ballard, Margaret Atwood o Patricia
Highsmith, directores como Cronenberg, Marker o Nolan, películas como Stars Wars, Los juegos del hambre o
Terminator y programas televisivos como Big Brother, Breaking Bad, Westworld o The Americans.