jueves, 20 de enero de 2011

Reckles - Cornelia Funke



Reckless
El goyl de jade
Cornelia Funke
Con ilustraciones de la autora
Traducción del alemán: Margarita Santos Cuesta
Fondo de Cultura Económica


(Buenos Aires)
En la habitación la noche respiraba como un animal en la sombra. El tictac de un reloj, el crujido del suelo de madera al salir de su habitación: todo se ahogaba en el silencio nocturno. Sin embargo, a Jacob le encantaba la noche. Sentía su oscuridad como una promesa sobre la piel; como un manto tejido de libertad y peligro…”.
Así empieza este nuevo libro de la autora alemana Cornelia Funke.
En síntesis: Jacob Recless descubre un espejo mágico en el despacho de su padre. A través de él puede trasladarse a un mundo donde los cuentos más oscuros cobran vida y donde hombres, hadas, duendes y otras criaturas conviven a veces en paz y a veces en guerra. Durante años este mundo ha sido refugio y hogar para Jacob, y en él ha buscado tesoros y objetos asombrosos para príncipes y reyes, pero por un descuido, su hermano Hill descubre su secreto y lo sigue detrás del espejo. Cuando la piel de Hill se transforma en jade por un hechizo del Hada Oscura, Jacob tendrá que enfrentar una carrera contra el tiempo y desafiar los sombríos poderes del hada para salvar la vida de su hermano.
Cornelia Funke (Dorsten, Alemania, 1958) estudió pedagogía e ilustración y frecuentemente es también la ilustradora de sus historias. Ha escrito más de cuarenta libros y es considerada la Rowling alemana. En 2004 recibió el Premio de Literatura de la Federación de Escritores Alemanes por la calidad de toda su obra. Su libro Jinete de Dragón recibió el Premio Zurich al Mejor Libro Infantil (2000) y el Premio Mejor Libro Infantil de la Casa de la Literatura de Viena (2001) entre muchas otras distinciones. La revista Time ha situado a Funke entre las cien personas más influyentes del planeta.
Cornelia Funke es una activa militante por los derechos de los refugiados y perseguidos étnicos, políticos y religiosos. En la ONG en la que se desempeña, Exilio, trabaja incansablemente, en especial, para proteger a los niños sobrevivientes.
Página oficial de Cornelia Funke

domingo, 16 de enero de 2011

Corredor de silencios - Cecilia Vetti




Corredor de silencios
Cecilia Vetti
RyC editora

(Buenos Aires)

Corredor de silencios es el segundo libro de cuentos de Cecilia Vetti. Junto con el libro La soga del tiempo, Acurrucada en la luz y Sueños de alas azules, la autora ha publicado parte de su obra narrativa. Los personajes de Corredor de silencios son variados. Puede ser una tranquila ama de casa, Kika, como las de Las madres – aunque la procesión corre por dentro – frente a los acontecimientos de la vida familiar, o la mujer que visita a su hermana enferma de Alzheimer  de Unas rejas tan altas o el personaje que vive en la miseria de Corredor de silencios o la psicóloga de La cisterna.
En el cuento La Peco la autora desnuda una  realidad social cercana en el tiempo. En La señorita Clo, una modista del barrio porteño de Boedo, la autora recala en una época retratándola junto al personaje. Ojo por ojo es la historia de una venganza y de odio entre dos mujeres que no se dan tregua, “la Elsa”, una modista y la doctora Estevez, una dentista. Estos últimos personajes pueden vivir tranquilamente en un barrio, dejando que los días transcurran plácidamente, hasta que el conflicto, que parecía esconderse aparece y estalla.
En Pedro, el personaje es un vendedor de diarios, “un rey sin corona sorteando la noche, metiéndose en los cafés de Buenos Aires…”. Al leer el cuento, el lector comparte la vida de este personaje y además ingresa a una época del país que no existe más. La autora rescata la memoria de ese tiempo y lo plasma en el cuento.
Estos cuentos no dejan indiferente al lector, mientras se leen,  el lector va participando en las situaciones, los conflictos, las pasiones que la autora ha sabido plasmar. Seguramente habrán sembrado alguna inquietud, ése parece ser el propósito de la autora. No es poco, Cecilia Vetti logra un efecto inquietante además de presentar con fidelidad y frescura narrativa personajes, épocas, situaciones que se revelan en el inmejorable ámbito de la literatura.

Cecilia Vetti (Buenos Aires) concurrió varios años a los talleres literarios de Mirta Arlt y Mempo Giardinelli. Actualmente pertenece a la Sociedad Argentina de Escritores (Lomas de Zamora) y participa en el Grupo Literario Convergencia. Es jurado de distintos certámenes y coordina talleres literarios. Por su libro La soga del tiempo recibió la Faja de honor de la SADE (2002). 

viernes, 14 de enero de 2011

Gaturro 16 - Nik - Ediciones de la Flor


Gaturro 16
Autores/edición: Nik y Laura Losovitz
Ediciones de la Flor

(Buenos Aires)

Gaturro 16 reúne la ya conocidísima  historieta de Nik. El singular personaje, Gaturro, es un gato que protagoniza esta serie de aventuras.

http://www.gaturro.com

Bife angosto 2 - Gustavo Sala


Bife angosto 2
Gustavo Sala
Ediciones de la Flor


(Buenos Aires)

Bife angosto 2 es un libro de historietas de Gustavo Sala, humorista que publica su tira de humor en el Suplemento NO del diario Página 12. Con humor ácido, irreverente, en sus historietas arremete contra los ídolos del rock y los personajes más estrafalarios con una gracia ponzoñosa y un dibujo virulento.
El prólogo es de Pablo Marchetti , director de la Revista Barcelona.
Al leer Bife angosto 2 el lector empieza a preguntarse ¿quién se salva?.
Además de la recopilación de las tiras publicadas en el suplemento NO, se incluye una entrevista al autor publicada originalmente en la revista Los Inrockuptibles.

lunes, 10 de enero de 2011

Al pie de la Casa Blanca - Luis A. Ambroggio - Carlos Parada Ayala (eds.)



Al pie de la Casa Blanca
Poetas hispanos de Washington D.C.
Luis Alberto Ambroggio
Carlos Parada Ayala
(editores)

Academia Norteamericana de la Lengua española

(Buenos Aires)

Al pie de la Casa Blanca – Poetas hispanos de Washington D.C. reúne poesías de poetas que viven en la zona de Washington D.C.. Con la compilación de Luis Alberto Ambroggio – poeta nacido en la Argentina y nacionalizado norteamericano – y Carlos Parada Ayala (El Salvador), la antología es una muestra, un somero reflejo cultural producido por la inmigración masiva del siglo XX. “Los poetas hispano/latinos de Washington D.C. – como tantos otros – tratamos de recurrir al género poético para expresar, en nuestro idioma, nuestra imaginación, nuestro idealismo, nuestra protesta, nuestro testimonio, nuestros recuerdos, acaso fieles a la raigambre castellana del Siglo de Oro en su necesidad de poetizar en tiempos difíciles, ecos de la afirmación de  Teresa de Ávila: “la vida no sería tolerable sin poesía”…”, dice Ambroggio.
La presencia hispano-latina en lo que ahora es Estados Unidos por más de cuatro siglos, se hace evidente en esta antología, donde la destilación del idioma castellano en ese país nos habla a través de estos poetas.
La obra incluye la poesía de 24 poetas más destacados de la zona y también dos ensayos de los editores. El de Luis A. Ambroggio enmarca el desarrollo de la poesía en Washington D.C. y parte de la base de que no hay una sola y dominante tradición poética en los Estados Unidos. También reconoce y enumera a quienes han documentado la historia, la importancia, los diversos cuerpos poéticos de la poesía escrita en español en los Estados Unidos.
En el ensayo de Carlos Parada Ayala presenta un contexto y reconocimiento sobre el desarrollo de la poesía hispano/latina en Washington, D.C. y además reconoce los principales esfuerzos de las instituciones e individuos que se tomaron la tarea de crear las condiciones para promover la creación poética que han generado los hispano/latinos radicados en esa zona: la Biblioteca del Congreso, departamentos de letras, lenguas modernas y facultades de español de las universidades locales, Academia Iberoamericana de Poesía, el Teatro de la Luna, El ColectivoParaesoLaPalabra.

El libro incluye poemas de: Luis Alberto Ambroggio, Francisco Aragón, Alberto Avendaño, Quique Avilés, Naomí Ayala, José “Cacayo” Ballesteros, Emilio Bernal Labrada, Rei Berroa, David Camero, Mayamérica Cortez, Robert Girón, Lorenzo Helguero, Consuelo Hernández, Gladys Ilarregui, Samuel Miranda, Vladimir Monge, Egla Morales Blouin, Carlos Parada Ayala, Grego Pineda, Arturo Salcedo Martínez, Martha Sánchez Lowery, Milagros Terán, José Manuel Varela Ferrer, Ada Vilageliu Díaz.

También se incluyen fotografías intercaladas entre los textos de Gerardo Piña- Rosales, quien diseño las cubiertas.

(c) Araceli Otamendi - Archivos del Sur

Manhattan Song - Luis Benítez


Manhattan Song
Cinco poemas occidentales
Luis Benítez
El fin de la noche

(Buenos Aires)

Manhattan Song reúne cinco poemas de Luis Benítez: Una tarde en el jurásico, El Hudson, Cinco contrapuntos para Erasmo de Rótterdam, Garbo´s building, Una borrachera de Pico della Mirándola.
El poeta escribió estos versos entre 1992 y 1993, cuando vivía en Nueva York. Según dice Luis Benítez: “…creo que la poesía no tiene temas, o que si los tiene, los emplea como excusa para referirse a otras cosas. Entonces, difícilmente se pueden buscar con ingenuidad en las páginas siguientes referencias a esa ciudad, rasgos anecdóticos o cualquier cosa del mismo tenor. El Hudson puede ser el Yang Tsé o el Mapocho o el mismo Río de la Plata. Los nombres propios que aparecen en este libro los inventé o bien, si corresponden a personas que conocí y traté, no se corresponden con sus personalidades. Hay aquí detalles que pertenecen a la realidad  y otros que provienen directamente de la imaginación, como en los sueños.
Como lo real es siempre inapresable, estimo que al valorar lo que supuestamente conocemos de nuestro entorno, incurrimos en la misma negligencia, que obviamos para no inquietarnos. Cuando hablamos o escribimos sobre lo que creemos conocer, gracias a esa involuntaria estratagema decimos cosas mucho más interesantes. Por ejemplo que, gracias a la analogía, Homero, Virgilio, Erasmo de Rótterdam o Pico della Mirándola pueden estar incluidos en el contexto de Manhattan Song…”.
El poeta Luis Benítez nació en Buenos Aires el 10 de noviembre de 1956. Su obra corresponde a la llamada generación argentina de 1980, caracterizada por la diversidad de elementos poéticos y extrapoéticos que intervienen en sus obras.
Según palabras de Elizabeth Auster, refiriéndose a la generación de Benítez:

"... Esta generación se propuso, por una parte, abolir las influencias inmediatas de autores como Pablo Neruda, César Vallejo y otros, características de la generación anterior (abandonar a los padres antes que matarlos, dice Benítez, para abrirse a un amplio campo de posibilidades, que incluye los aportes de la poesía anglosajona. Las búsquedas extrapoéticas de esta generación se aprecian en las referencias a sistemas de ideas provenientes de lo filosófico, lo político, inclusive lo histórico.
Una referencia temprana a esta diversidad en la que se inserta generacionalmente Benítez se encuentra en el artículo "La poesía argentina de hoy". Editado por una publicación de la Université de París en 1988, el artículo es el primero, hasta donde se tenga noticia, que encaró el estudio de la generación de 1980 argentina, dividiéndola en distintas tendencias. Según el criterio de los articulistas, Benítez integra la corriente definida como metafísica...".
En uno de los poemas, Garbo´s building, el poeta, piso por piso, va describiendo, presentando a los habitantes, a las casas, a las vidas que las habitan o las habitaron.  Personajes, muebles, historias de vida,  se conjugan en un muestrario.  A través de la enumeración de los muebles, de imágenes,  por ejemplo  en Noveno piso: Pent House:

“La puerta, las paredes, el empapelado, las formas, las cortinas, las alfombras, los ceniceros, las cómodas. Los armarios, las mesas, las sillas, los sillones. Las ventanas, los atardeceres, las madrugadas, las noches, los amaneceres. La cocina, los enseres, los utensilios, los manteles. Los pasillos, las sombras, el aire a encierro, una puerta entreabierta, la humedad, la ceniza. El polvo, las telarañas, los ruidos de la calle. El baño, las goteras, los mosaicos, el espejo, la ducha, las rajaduras, el óxido. Los insectos muertos, la mugre, las colillas, los enchufes. El dormitorio, las sábanas, los libros, las luces apagadas, las almohadas. El televisor, la radio, los cables, las revistas. El salón de estar, el techo, la biblioteca, el par de sillones, la mesa baja, los periódicos, la lámpara de pie, el aparato de aire acondicionado. El balcón, las plantas de tiesto y el vacío”.

Luis Benítez escribe poesía y establece con el lector un diálogo. El lenguaje existe, el arte existe porque existe “el otro”, dice George Steiner. “Es verdad que nos dirigimos a nosotros mismos en constante soliloquio, pero el medio de ese soliloquio es el habla pública: contraída, hecha privada, y quizás críptica,  por medio de referencias y asociaciones ocultas pero fundamentada, sin embargo, y hasta el límite incierto de la conciencia, en su vocabulario y una gramática heredados y determinados histórica y socialmente…”, sigue diciendo Steiner. Estos poemas de Luis Benítez ofrecen su refinada sensibilidad en el misterioso encuentro con el lector, cuando entonces, como decía Borges, ocurre la poesía.

© Araceli Otamendi - Archivos del Sur

Bibliografía:

George Steiner, Presencias reales, Ensayos/Destino, Ediciones Destino S.A. (Barcelona)

martes, 4 de enero de 2011

Extraño oficio - Javier Claure Covarrubias



Extraño oficio 

Javier Claure Covarrubias
Edición del autor
Prólogo de Luis Andrade S.

(Estocolmo, noviembre 2010)

(Buenos Aires)

Extraño oficio es el segundo poemario del escritor boliviano, residente en Suecia, Javier Claure Covarrubias.
Los poemas de Javier Claure están signados por el amor erótico, el compromiso social, la escritura sobre la escritura, el oficio de escribir y la nostalgia por su tierra natal, Bolivia y Suecia, el lugar donde reside hace ya muchos años.
Extraño oficio se refiere al extraño oficio de escribir poesía, porque la vida agridulce, dice el autor en un poema, es un póker de tres púas, y en su vaivén, atado a mis sueños, mis lamentos y mi traje de ermitaño, caminé con una llaga en el costado entre rosales y ataúdes.
En uno de sus poemas, A veces, Javier Claure Covarrubias dice:

A veces dicen que estoy muerto
y me río a carcajadas en un teatro
a veces dicen que el tiempo cierra las heridas
y me pregunto de qué llaga abierta será el que hiere
a veces dicen que el exilio come las ideas y principios
 yo les digo que tienen la razón…”.

Cualquier persona que se haya alejado, por la razón que fuere, de su lugar natal, sabe que las palabras de Javier Claure son ciertas, dicen verdades. Se trata entonces de un testimonio que se hace poesía cuando las palabras se encuentran con el lector, como decía Borges.
Y ya lo decía también Octavio Paz: “…ni la angustia, ni la exaltación amorosa, ni la alegría o el entusiasmo son estados poéticos en sí, porque lo poético en sí no existe. Son situaciones que, por su mismo carácter extremo, hacen que el mundo y todo lo que nos rodea, incluyendo el muerto lenguaje cotidiano, se derrumben. No nos queda entonces sino el silencio o la imagen. Y esa imagen es una creación, algo que no estaba en el sentimiento original, algo que nosotros hemos creado para nombrar lo innombrable y decir lo indecible. Por eso todo poema vive a expensas de su creador. Una vez escrito el poema, aquello que él era antes del poema y que lo llevó a la creación – eso, indecible: amor, alegría, angustia, aburrimiento, nostalgia de otro estado, soledad, ira – se ha resuelto en imagen: ha sido nombrado y es poema, palabra transparente…”.

El poemario de Javier Claure es una experiencia, la imagen se abre ante el lector y le muestra su abismo traslúcido. Lo poético es algo que hacemos y que nos hace. El poeta es poeta gracias al poema. Extraño oficio ese de escribir poemas, como el de Javier Claure, que nos revela a un poeta que realiza una  búsqueda de sentido, una búsqueda que está más allá, en un horizonte que apenas se aclara. 

(c) Araceli Otamendi

bibliografía:

Octavio Paz, La casa de la presencia, Obras Completas, Fondo de Cultura Económica