tapa del libro (circa) de Alicia Silva Rey |
presentación de (circa) en la Biblioteca Nacional |
Daniel Chao, Alicia Silva Rey y Melina A. Varnavoglou |
Alicia Silva Rey
Añosluz Ediciones
(Buenos Aires) Melina A. Varnavoglou
"Alrededor de" lo humano, la naturaleza y la historia
Una lectura de "(circa)", de Alicia Silva Rey
La fecha y la cifra como fórmulas de la empatía
Se podría pensar que porque en estos poemas de Alicia no hay un "yo poético" ni siquiera sugerido, se abunda en el uso de cifras, fechas históricas, citas, fragmentos de enciclopedia, el fin del autor con ellos es no provocar ningún tipo de identificación y que, por lo tanto, la forma de aproximarse a la obra es meramente conceptual. Podríamos con justicia –no sin parcialidad-, decirlo. Pero eso no es lo que me pasó a mí y no creo que el libro deba leerse en esa clave.
Estamos quizás muy acostumbrados a una sola una forma de identificación en la poesía: la de un yo que discurre acerca de su experiencia. Sin embargo, el sentido clásico de empatía en la tragedia se lograba a través del uso de tipos o situaciones universales, no con personas en una experiencia concreta. Estos tipos tenían que encarnarse en personajes familiares, comunes pero construidos con la suficiente distancia en la representación, para poder emocionar a cualquiera. Lo demasiado cercano, satura. Lo demasiado lejano, inhibe. Creo que Alicia juega muy bien con esa tensión y nos lleva de lo particular a lo universal, todo el tiempo. Eso lo hace con el empleo de datos históricos, que perfectamente podrían ser inventados. Por eso "(circa)": "alrededor de". Me parece importante hace hincapié en eso porque una crítica fácil que puede recibir este libro es que es hermético, que es poesía para historiadores. Yo no necesito saber la procedencia de tal o cual nombre o la referencia a una fecha para entender los personajes y las situaciones de Alicia. El uso del "dato" Alicia lo utiliza con plena conciencia poética: para fijar su objeto, sin interponerse. La mirada de ella está en ese recorte, en la composición de la escena que es el poema. Y el resultado es la autonomía con que estos personajes nos interpelan, con esa fría y fija fuerza.
Además, el dato histórico o la cifra provocan el efecto de "pasmar" al lector. Hay un sentido filosófico en esto también, que fue conceptualizado por Kant como lo "sublime matemático" describiendo aquel sentimiento ante las magnitudes infinitamente grandes o infinitamente pequeñas que en nuestro intento por abarcar conceptualmente esa inmensidad, provocan un desajuste de la razón y para intentar no perder del todo su unidad, recurre al uso de la imaginación. El resultado general de esa experiencia es el placer de lo sublime. Alicia lo genera y se burla de ese vano intento de racionalización en "Movimiento de los planetas"
Así, Alicia a lo largo del libro nos hará ponernos en el lugar de un beduino, de una esposa japonesa, de las aldeas de indochina, de agricultores del Congo y lo novedoso es que para colocarnos en ese rol, nuevamente no recurre a la "voz" de esos personajes, sino que describe algo mucho más íntimo aun: los objetos con los que se relacionan: sus alimentos, sus animales, su vestimenta, etc. Y también hay un sentido político en esto, pues estos personajes "al no hablar", son también recreados por la mirada del Otro y es ahí donde descubrimos la operación de la historia sobre ellos. Esto es lo que puede leerse en el poema "El beduino argelino".
De la historia al organismo y otra vez a la historia
Por eso la historia en este libro no es sólo recurso, sino más bien ideología.
Parte de una visión filosófica de la historia –contraria a la hegeliana, por ejemplo- de que en definitiva la historia monumental será consumida por la natural. Los grandes personajes históricos, las culturas occidentales, los Estados-nación aparecen erosionados y reducidos a su materia en los poemas de Alicia; y no por la historia o el proceso de la Naturaleza en mayúscula, sino de los procesos naturales imperceptibles, aquellos que lentamente se encargan de la descomposición.
Una es la reducción o la descomposición de lo humano en lo orgánico, a través de lo animal. Quisiera mostrar esto con un poema- que por cierto me parece uno de los mejores del libro-:
Extracto de carne
aquéllos por los que luchás, Favio, ahora duermen
son operarios, cien distintos, humeantes,
en batas de faena, convulsos ágiles en sus afiladas cuchillas
apenas distinguibles en el rítmico lucimiento
de las hojas. Llámase extracto de carne
a un caldo destilado a partir de la cocción
o recalentamiento global de la carne
de gran ventaja en la manufactura de sopas y potajes
rápidos o fast food, también conocidos como Liebig,
nombre de autor (Nuestro País: Cuadros descriptivos
del Uruguay, ca. 1920); del matadero
de Fray Bentos salen atormentadas lonjas de vaca,
sombras de una lengua pedestre
hablada por bocas de proletarios cocidos
al vapor de la sangre que me llena, Favio, de horror
cuando tras hiendo
alguna de las puertas limítrofes
que guarda el matadero
Otra, la de lo histórico a lo natural:
Clima
casi no hay lugar
donde uno pudiera aclimatarse
europeos a cargo de explotaciones
recurrimos a los indígenas
bueyes, caballos, perros
perecen debido a las termitas
y las moscas tsé tsé
Hay sin embargo una parte –que me pareció la más original- donde se describen grupos humanos que resisten a esta reducción, precisamente porque son grupos humanos - aquellos pueblos que Hegel consideraría "fuera de la historia"- que están fusionados con lo natural. Alicia arma un mapa de pequeños grupos de habitantes que se ubican en aldeas; en cada poema por la referencia geográfica nos damos cuenta que están uno al lado del otro.
Veamos por ejemplo esta pequeña fantasía sobre uno de esos pueblos:
Los tungusos
(entre los ríos Lena y Amur) baqueanos
Sutilísimos, persiguen invisibles huellas
Animales por el musgo y la hierba
Su tierra es sostenida por una inmensa rana
Entonces, ¿quiénes son los que resisten el implacable paso de la historia? Aquellos que se saben fragmento, ocasión de lo natural, y en esa contingencia se arraigan. Así disputarán a la historia monumental: desde el organismo. Estos son los seres que crea "(circa)". Al principio parecieran petrificados por la rigidez de la estructura, el fichaje histórico, pero a lo largo del libro se desenvuelven y nos interpelan en nuestra miniatura, porque somos, lo sabemos: insignificantes para el paso de la historia y de la naturaleza. Pero ¿en qué radica si no en eso toda la violencia de estar vivos?
* "(circa)", Buenos Aires, Añosluz ediciones, 2014-2015 *
(c) Melina A. Varnavoglou
Alicia Silva Rey nació en Quilmes, provincia de Buenos Aires, en 1950.Es docente de enseñanza primaria (maestra y bibliotecaria escolar). Escribió: La mujercita del espejo (1985); Fragmento de correspondencias (1996-2003); Partes del campo (1998); Orillos (2006).
Publicó La solitudine (Bs. As., CILC, 2009) y (circa), Bs. As., Años Luz, 2014.
Colaboró con Gustavo Fontán en el guión de su película La madre (2010). Escribe en del Sur, agenda cultural de Quilmes, que dirige Sonia Otamendi y colabora en "Revista Archivos del Sur", que dirige y edita en la web, Araceli Otamendi
Melina Alexia Varnavoglou (Villa Ballester, 1992). Es poeta. Estudia Filosofía en la Universidad de General San Martín (UNSAM). Participa de diversos ciclos literarios en la ciudad de Buenos Aires y colaboró en el proyecto audiovisual "Literatura Histérica" y en la grabación del audiolibro "La vida en Córdoba" de Vicente Luy.
Ya puede conseguirse (circa) de Alicia Silva Rey, en Librería Norte, Lilith Libros, Otra Lluvia Libros y Librería Mi Casa! Pronto en más lugares...http://aniosluz.com.ar/
Para leer (circa) online http://issuu.com/aniosluz/docs/circa_marzo_11_de_2014_maquetaci__n
http://aniosluz.com.ar/
texto y fotografías de Melina A. Varnavoglou, el poeta Daniel Chao y Alicia Silva Rey y presentación de (circa) en la Biblioteca Nacional de Argentina enviadas para su publicación en la revista Archivos del Sur por Alicia Silva Rey.
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